La percepción que tenemos el profesorado sobre la relación que tiene la institución con la innovación educativa es: La Gestión. Sus principales actividades son la promoción, potenciación, implantación y divulgación entre el profesorado de la innovación educativa. Algunas de esas actividades tienen éxito (como por ejemplo promover y potenciar) y otras no tanto (como la implantación).
Pero esa es la percepción, realmente las instituciones sí han realizado innovación educativa (o al menos la han implantado de forma corporativa). Todas las innovaciones tienen unas pautas y características comunes.
La característica común es que todas las innovaciones están relacionadas con los contenidos en abierto (y eso es de agradecer). Como ejemplo, la cronología de lo sucedido en las universidades ha sido la siguiente:
En los años 80 se propició la digitalización de contenidos. El profesorado tenía los recursos propios en soporte papel (textos y dibujos “a mano”). El recurso propio más característico era el de los apuntes del profesor, que pasaban de mano en mano año tras año. Las personas que gestionaban la universidad vieron la necesidad de tener los recursos propios en soporte digital. Actualmente los recursos los preparamos directamente en soporte digital de forma sencilla, pero en los años 80 el proceso de digitalización era caro y complejo. Sin la firme determinación de las instituciones la digitalización de contenidos se habría retrasado muchos años.
En los años 90 se propició la inclusión de sistemas e-learning como apoyo a las asignaturas. Las asignaturas a distancia rápidamente incorporaron estos sistemas. Pero también lo incorporaron, gracias al apoyo institucional, las asignaturas presenciales. Actualmente estos sistemas siguen siendo promovidos por las instituciones a través de los denominados campus virtuales. Su labor de gestión es importante ya que la mayoría de las asignaturas tienen un apoyo virtual.
En los primeros años del nuevo siglo se promovieron las asignaturas denominadas OCW (Open Course Ware). Dichas asignaturas ponían a disposición de la sociedad (de forma libre) los contenidos digitalizados de dichas asignaturas y normalmente a través de un sistema e-learning. Esta iniciativa gozó de mucha popularidad hasta hace unos años y actualmente, aunque continúan existiendo estas asignaturas, están siendo poco utilizadas.
Desde el 2012 se están promoviendo los denominados MOOC (Massive Open Online Course). Estos se pueden considerar una evolución de los cursos OCW. La idea general de compartir contenidos en forma abierta es muy similar, pero la diferencia es que en los cursos OCW se dejan los contenidos en abierto sin interacción entre los usuarios y en los MOOC el acceso está abierto a cualquier persona pero lleva incluido un proceso de formación (y además masivo).
En todos estos casos, suele ser la institución la que se adelanta al profesorado. La institución promueve y da soporte material para su realización, establece normativas y controles de calidad y además suele responder a una estrategia concreta.
Bueno, con esto demostramos que las instituciones (cuando quieren) saben hacer innovación educativa. Ahora solo falta que además de hacer innovación en contenidos también la haga en los procesos formativos: tener innovación en contenidos sin renovar las metodologías, la verdad es que no sirve de mucho
Categorías:Historia Informática Educativa
Investigación e Innovación Educativa 
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Buenas noches quisiera saber algunas orientaciones de como entrar al Entorno Virtual de Aprendizaje (EVA) que está en la Plataforma Moodle ya que estoy haciendo el curso de Educación y Tecnologías de la Información y Comunicación y tengo una actividad que se llama auto matriculación
ya que es a través de la plataforma Moodle esperando una repuesta agradecidamente
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Pues según este artículo las instituciones colaboran económicamente. Pero sigo pensando que lo hacen mucho después de que el profesorado haya innovado por su cuenta. Entiendo que para convencer son necesarias muchas experiencias positivas, no basta con que un solo docente invente algo. Y claro que es cierto que no basta con modernizar los soportes de los contenidos, es fundamental actualizar las meodologías.
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…»tener innovación en contenidos sin renovar las metodologías, la verdad es que no sirve de mucho»…
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igualmente, pienso que innovar en metodologías sin prestar atención a los contenidos no vale de mucho. Veo a mi alrededor mucho interés por la innovación que implica tecnologías, pero en muchos casos, cuando se rasca a superficie se ve que no hay mucho más. Si junto a la innovación tecnológica no atendemos a las dificultades de aprendizaje, al modo en que se aprende y a la secuencia en que presentamos los contenidos, no estamos aportando demasiado
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Hola a tod@s! Generalmente la innovación que genera cada docente es metodológico puesto que la existencia de contenidos limita a que se puedan crear alguna de otro tipo… lo interesante, es que en algunas instituciones, como en la que yo laboro, puedo hacer cambios de contenido según el proyecto que yo quiera manejar. He aquí uno de los motivos por los cuales estoy en el curso… pienso sacarle provecho a esta oportunidad. Un abrazo!
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Cierto, tener innovación en contenidos sin renovar las metodologías, la verdad es que no sirve de mucho y para ello se necesita también preparación, tiempo, incentivos, reconocimiento….. ¿dónde queda todo ello?
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Es de aplaudir a las instituciones, a quienes podemos ver muchas veces como «paquidérmicas». Lo cierto es que mover instituciones de más de 100 años como las universidades no es tarea fácil, pero al ver lo que hoy tienen (como donde yo laboro), me hace reflexionar sobre el gran esfuerzo que hay que hacer. Ojalá pueda aportar a ese esfuerzo con esto que aprendo.
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Los Mooc que he tomado confirman lo que se menciona en este artículo, ya que es motivante experimentar el interés y apoyo de los coordinadores y docentes del MOOC para que logremos el mayor provecho del mismo.
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Hola a todos,
Para mí es interesante ver como gracias a las posibilidades que nos aportan las TICs, estamos creando entre todos un ambiente más abierto, flexible y creativo, donde la interacción, el diálogo y el entendimiento fluyen cada vez con mayor faciilidad. Algo que está presente también de manera creciente en la relación que existe entre las instituciones y los usuarios de la formación.
Creo que la Comunidad Docente en estas circunstancias, cada vez lo tiene más fácil para conseguir encauzar cooperativa y conjuntamente la mejora en calidad de sus Metodologías Educativas en el Aula.
Un saludo
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Para mí ha sido todo un descubrimiento conocer innovaciones metodológicas como por ejemplo flipped y saber que «esa manera peculiar de dar mis clases» que llevaba practicando años, tenía nombre y lo hacía más gente. Y sobre todo poder compartir materiales y experiencias es enriquecedor e ilusionante. Cuando una va «contra corriente» innovando en el aula propia se corre el riesgo de la incomprensión del resto de compañeros, del centro. Yo he tenido suerte en ese sentido pero entrar en contacto con otros profesores que han probado el método y han experimentado que funciona te anima a seguir. Y lo he descubierto gracias a los MOOC por lo que la innovación institucional me ha dado la oportunidad de seguir con la metodológica y no es del todo descartable enlazar con la investigación y publicación de resultados (I+D+I)
Tres tipos de innovación separados pero íntimamente ligados.
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Estoy totalmente de acuerdo en que cuando las instituciones quieren o se lo proponen, se producen cambios muy significativos. Pero el problema a mi parecer no está en la falta de ganas por parte de las instituciones, sino más bien diría que es el poco conocimiento que se les aporta a los docentes para poder llevar a cabo de manera correcta lo que las instituciones piden,
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Cuando se quiere, se puede. El problema es querer. Todo cambio puede dar cierto vértigo al principio, aparte de toparse con las facciones más reaccionarias que se sienten cómodas haciendo lo mismo de siempre ya que cambiar requiere de más esfuerzo que recurrir a lo que ya está preparado y listo para ser impartido.
Creo que la innovación debe darse en todos los aspectos: conceptuales, metodológicos y también epistemológicos (estos últimos se nos olvidan con excesiva frecuencia). No podemos explicar la realidad del tiempo en que vivimos con los mismos términos que eran válidos para explicar la realidad del tiempo en que los sistemas educativos vieron la luz. Y hasta que no se dé este «cambio de chip», todo lo que hagamos podría ser comparable a poner parches para disimular, embellecer o ocultar el verdadero problema. Con esto no quiero decir que no hayamos mejorado ni un ápice, que sí lo hemos hecho. Aun así, no se ha dado ese cambio estructural que necesita un sistema como el nuestro, ni tampoco la inversión económica que requiere el buen funcionamiento del mismo.
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Este panorama muestra lo vital que resulta ser el reconocimiento en las IES en cuanto al compromiso con la transformación educativa y los aportes para la formación y el fortalecimiento pedagógico del factor profesoral.
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Muy cierto, la innovación Institucional se promociona, potencia y divulgación, el problema es el aula, que no todos los docentes la implantan, por diversas razones, por tanto muy cierto la diferenciación de innovación educativa institucional e innovación educativa en el aula.
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